Me gusta cumplir años.
Aunque no os voy a negar que es un subidón hacerlo en diciembre. Vas viendo cómo tus amigas van cayendo una a una a lo largo del año. Y tú, mientras, dibujas una sonrisa burlona en tu cara que dice: aún me quedan unos cuantos meses, amiga. Es más, a veces (la mayoría), se lo recuerdas porque presta más si lo oyes en voz alta. Pero oye, todo llega… ya me toca. Ni tan mal. No soy de ésas que piensa que cualquier tiempo pasado fue mejor o que estaba mejor a los 18. Yo no.
A mis 18 estaba pasando mi primer año en Salamanca, en el cole mayor. Y ocupé mi tiempo libre en hincharme a donus, a fritanga y a ver Felicity. Hecho que tuvo sus consecuencias… 4 suspensos y 15 kilos más. En mi 1,61 de estatura… imaginaros… (No, mejor no cuelgo foto).
“La vieyera” no me ha tratado mal. He cambiado los donus por “mover el culo” y los 4 suspensos… aún no sé. Porque, aunque de forma y motivación muy diferente, he vuelto a estudiar a Salamanca.
Con la mayoría de edad “necesitaba” tapones para estudiar. Ahora soy capaz de hacerlo con Caillou, con un elefante barritando, quitando mocos o dando jarabes.
Me gustan los 34. Me gusta vermutear en lugar de trasnochar; me encanta que las horas de sueño sea mi hijo quien me las quite; adoro “ponerme piripi” (expresión muy de madre) con un par de vinos, si es bueno, mejor; aprovechar los domingos para ir al monte en lugar de arrastrarme en bata por casa… Pues eso, que no los cambio por nada. ¡¡Felices 34 a todos!! (Tengáis o no los tengáis)
3 Comentarios
Jaime Zapico Camblor
Está muy chulo tita!
15 dic 2015 04:12 pm (@Twitter)
Lucía Zapico Fanjul
El comentario más chulo no, chulísimo, del sobrino mejor del mundo mundial! Te quiero Jaimichu ;-)
16 Dec 2015 10:12 am
Cris M.
No te chulees tanto de cumplirlos la última. Tienes patas de gallo, listilla.
20 dic 2015 11:12 pm (@Twitter)
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